martes, mayo 17, 2011

NOSOTROS



Hace exactamente un año, escribí el texto que viene a continuación, no lo publiqué en su día por motivos obvios.

Ayer lo leí, y es curioso, ya hace dos meses que tengo la sentencia de divorcio. Me estoy encontrando a mi misma y me quiero mucho...

Ahora entiendo por qué mi expareja no era capaz de hablar de nosotros, el tiempo lo ha puesto todo en su sitio, él quería disfrutar de una nueva vida pero sin arriesgar la que tenía.

Hoy me reafirmo en la decisión que tomé en su día y ojalá encuentre a la persona que verdaderamente me merezca.


Con este texto, pongo punto y final a una etapa de mi vida, entro en una nueva, con los ojos muy abiertos y con muchas ganas de disfrutarla.


Nosotros
Sólo una palabra, sólo hacía falta que pronunciaras una palabra, para creer que había alguna posibilidad, que aún estábamos a tiempo de parar y mirar lo que estábamos haciendo, de ver en qué nos habíamos convertido…
No era el momento de buscar culpables, eso no resuelve nada, ambos sabemos donde ha estado el problema, aunque tú veas unos problemas y yo vea otros, así no se arregla nada… Sólo pretendía que dejaras de hablar de ti (que borraras “yo” y “mi” de tu vocabulario) y hablaras de nosotros, de lo que tenemos en común… Y descubrí con horror que se te había olvidado y peor aún, que no tenías ninguna intención de recordarlo.
Es duro escuchar relatar tus últimos ocho años, en los cuales, por lo visto sólo has existido tú.
Lo siento, te pido perdón por no haberme dado cuenta antes, por haber continuado a tu lado y no haberme dado cuenta de que ya no tenía ningún valor para ti, y ahora que miro hacia atrás con otros ojos, me doy cuenta que tampoco lo tenía para mí (he estado tan ciega…).
Hoy por hoy se lo mucho que valgo y que aquel que no me valora no me merece.
Con lo fácil que hubiera sido todo si hubieras dicho esa palabra, esa única palabra que no has sido capaz de decir: “nosotros”…


(Abril 2010)


Te he querido mucho, pero ya he empezado a olvidarte...