viernes, octubre 02, 2009

Tres generaciones y un destino


Un sueño, quise hacer realidad un sueño….

El sueño de quien todo lo dio por sus hijas, por su esposo, por su casa, por los demás…
Siempre una sonrisa en su rostro, siempre un truco para poder ahorrar, profesora de la vida y mil historias que contar…
Y ahora que los años pasan, se apodera de su ser una horrible enfermedad, ¿qué hay peor que no poder recordar?

Es por ello que no me lo pensé dos veces, cogí el teléfono y reservé tres plazas en ese barco, que en un fin de semana, nos haría disfrutar de un relajante crucero con destino a Casablanca.

- Menuda sorpresa hija mía, menudos nervios,… ¿qué me pongo?, ¿qué me llevo?...

Mi hermana menor le preparó la maleta. Mi otra hermana, se ocupó del pasaporte. Y yo me encargué de organizar el viaje…

Seríamos tres las viajeras, tres generaciones, madre, hija y nieta, tres motivos diferentes y un objetivo común, hacer que temblara Marruecos sin pasar desapercibidas.
Risas, juegos, bailes y fotos, muchas fotos y mucha complicidad…

Toda una experiencia inolvidable mamá.